viernes, 18 de febrero de 2011

¿Por qué me pones límites?

- Podían comer del fruto de todo árbol, excepto de uno - no cabe duda que desde Adán hay límites. Y con Noé que tenía toda la tierra delante de él, vemos también otro límite:

“Todo lo que se mueve y vive, os será para mantenimiento: así como las legumbres y plantas verdes, os lo he dado todo. Pero carne con su vida, que es su sangre, no comeréis.” (Génesis 3:4)

Los límites de Dios no son excesivos: comer de todo arbol menos de uno no se veía algo asfixiante; igual Noé, podía comer todo excepto carne con su sangre.

En Dios podemos disfrutar mucho, pero, ¿no es verdad que hay peligros en mucho de lo que hacemos?

Los límites entonces no son para coartarnos la felicidad sino para prevenirnos del peligro del pecado que acabará con toda dicha para siempre

Es prudente, vivir dentro de los límites de Dios, y no es tarde para volver a ellos.

Mis2minutos
Suscribe a un conocido, envía comentarios, o solicita baja en:
mis2minutos@hotmail.com
Archivo histórico: www.mis2minutos.blogspot.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario